jueves, 8 de abril de 2010

Preguntas incómodas

Formular preguntas es un ejercicio más estimulante que aprender respuestas trilladas a problemas empaquetados. Es cierto que hay algo de irreverente en la interrogación de algunos aspectos que pertenecen a los saberes consagrados o a la historia oficial, pero no es ese el espíritu de estas preguntas. La intención es activar la investigación y el pensamiento autónomo sobre toda versión dogmática u oficial y, por supuesto, “no es para mal de ninguno sino para bien de todos”.


1- José de San Martín (1778-1850)
Llegó a Buenos Aires en 1812, cruzó los andes con el Ejército Libertador de Chile y Perú y renunció al gobierno de Lima en 1822. A partir de ese momento comenzó su retiro regresando a Europa en 1824.
Entre 1824 y 1830 alternó su residencia entre Bélgica e Inglaterra. Las revueltas de 1830 lo encontraron residiendo en Bruselas, lugar que decidió dejar por otro más seguro en las cercanías de París en 1831.
En 1834 adquirió una finca en Grand Bourg con un vasto parque, sobre el Sena, a 8 km de París, y una residencia en la ciudad, en la Rue Saint George 35, alternando sus días entre una y otra. Es en este período en que se encontró con el Rey de Francia y con visitantes notables: Alberdi, Varela, Sarmiento, entre otros.
Por razones de seguridad (el movimiento revolucionario de 1848), decidió dejar París y radicarse en Inglaterra, pero en el camino, se radicó en Boulogne Sur Mer, donde rentó la 2ª y 3ª planta de una casa de 2 pisos a su propietario, que vivía en la planta baja. Allí falleció en 1850.

La pregunta es:
¿Les parece a ustedes que la persona que residía en una casa como esta, en la primera mitad el siglo XIX, de la que era propietario, era una persona en la pobreza y que llevaba una vida austera?


2- Juan Manuel de Rosas (1793-1877)
Su vida política, de 1829 a 1852, tuvo fin con la derrota en la batalla de Caseros, luego de la cual se fue al exilio en Inglaterra. Al principio vivió en un hotel en Plymouth y luego en el Windsor Hotel, de Southampton, cercano a Londres.
En 1853 alquiló, con permiso previo solicitado a la Reina, una granja con 50 hectáreas, bastante venida a menos por lo que tuvo que renovar el techo de paja de la casa.
Vivió allí todo el resto de su vida, haciendo las tareas de campo y, a juzgar por los comentarios de Alberdi, Tomás de Iriarte, Pérez Rosales y otras personas notables que lo visitaron, vivió del producido de la explotación de la granja. Incluso, en su testamento dejó constancia de que debía 4.000 libras esterlinas en concepto de arrendamiento y que en cuanto el Gobierno Argentino le devolviera los bienes confiscados y el dinero que le debía, su albacea debía proceder a dicho pago con los intereses que correspondieran.
Rosas dirigió desde 1829 hasta 1852 los destinos de la provincia de Buenos Aires y de buena parte del país. Incluso fue nombrado Restaurador de las Leyes y tuvo la suma del poder público en sus manos. La historia oficial de Mitre, Sarmiento y otros próceres lo consideraron un repudiable tirano y un producto de la barbarie, así como la cabeza de un poder corrupto desde el que se enriqueció de manera escandalosa.


¿Será cierto que quién vivió los últimos 25 años de su vida en esta casa alquilada y trabajó personalmente en ella se enriqueció ilícitamente durante 23 años y robó tanto dinero como para amasar una inmensa fortuna?
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8 comentarios:

Unknown dijo...

Ta clavado Fernando. La historia oficial es una mierda. Una enorme mentira de la primera letra a la última. Y un argentino tiene que ser muy guapo para hacerse esas preguntas sobre San Martín.
Los próceres no se cuestionan. Bastante trabajo costó inventarlos.

juan pascualero dijo...

Tiene razón el Santi, no hay que meterse con los próceres. En realidad no existen, son un elemento educativo.

andal13 dijo...

Mirá, falta que digas que Lavalleja cruzó el río en el Buquebús!!!!

Marple dijo...

Nunca he podido entender si Rosas fue "malo" o "bueno".
Cómo no quiero opinar sobre historia argentina y menos sobre esos próceres, te digo que las dos casas me encantan.
Lo bueno sería vivir casi todo el año en la de San Martín y dejar la de Rosas para las vacaciones.
Mientras tanto, enseño la historia oficial del Uruguay, ahorrando mi sueldito para comprar casas similares:)

Fernando Terreno dijo...

No tenía la intención de meterme con ídolos, totems, dioses ni próceres. Sólo que no me gusta que nos tomen por más tontos de lo que somos, que ya es bastante.
En cuanto a "Malos y Buenos", Rosas debe haber sido malo. Los únicos "buenos", según aprendí en las películas, son los norteamericanos.
Un abrazo.

Marple dijo...

Fernando:
me encantó tu respuesta.
Mi ídolo histórico es Artigas. Me parece que fue "bueno" porque le fue muy mal.Por supuesto todo lo pasado es materia opinable y depende de quién escribió la Historia.

Hablando muy en serio:)
te autorizo a criticar a Los Beatles, nada podrá evitar que me gusten cada vez más!!!

Sergio Carbone dijo...

El comentario va dirigido al que formula las "preguntas incómodas": leé historia querido, informate, investigá, no hagas comentarios infundados y baratos de café (típico de algunos argentinos). En cuanto a San Martín, pasó enormes dificultades económicas durante los primeros 11 años de su exilio porque no recibía la guita que le correspondía por pensión militar, ni de la Argentina, ni de Chile ni de Perú. Hasta que se reencontró con un amigo español de la adolescencia (el Marqués de Aguado), un banquero millonario que lo sacó de la pobreza y le dió la suficiente guita para que se compre esas propiedades y lleve la digna vejez que merecía. En cuanto a Rosas, era un terrateniente riquísimo nacido en cuna de oro, que no gobernó para "robar",gobernó para tener poder político (además del económico que ya tenía de recontrasobra), y cuando lo derrocaron en la batalla de Caseros se tuvo que exiliar de urgencia (para que no lo boletearan), y todos sus bienes fueron confiscados. ASÍ QUE ESTUDIÁ QUERIDO, ESTUDIANDO TE VAS A FORMULAR PREGUNTAS INTERESANTES, NO PAVOTAS.

Fernando Terreno dijo...

No desmerece en nada la figura de San Martín que yo pueda formular preguntas incómodas/pavotas, por ejemplo:
¿Por qué tendría San Martín que tener una pensión militar de la Argentina a la que sirvió durante 4 años y no de España a la que sirvió el triple de tiempo o de Perú de la que fue Jefe de Gobierno?
Qué suerte y simpatía debía tener para que un amigo le regalara el palacio/residencia de Grand Bourg. En mi pueblo los llaman testaferros a los que cumplen algunas funciones.
¿Los intereses de quién representaba OFICIALMENTE San Martín en su exilio francés? ¿Los del Rey de España o los del Gobierno Argentino?
Gracias por su consejo, agarrar los libros nunca me vendrá mal.