jueves, 7 de junio de 2012

Ray Bradbury

Ray Bradbury (1920-2012)
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Ahora que murió, y como pequeño homenaje, vaya una apostilla sobre el bombero incendiario que quemaba libros en su novela Farenheit 451 (1953).
Tiene el mismo nombre, Montag, que un personaje de otra famosa novela, El proceso (1918), de Franz Kafka. Está en los capítulos que fueron separados por el propio autor. Las ediciones que preparó Max Brod (1925) no los traen, pero las versiones completas los incluyen al final.
El personaje en cuestión es la señorita Montag (lunes, en alemán), la profesora de francés que se muda, al principio de la novela, al cuarto de la atractiva señorita Bürstner, interpretada por Jeanne Moreau en la versión cinematográfica de El Proceso, con dirección de Orson Welles.
Dicho sea de paso, Farenheit 451 fue llevada al cine en 1966 con el mismo título, con dirección de Francois Truffaut y Oskar Werner en el papel de Montag.
A su vez, Jeanne Moreau y Oskar Werner (más Henri Serre) son los protagonistas de Jules et Jim, otra recordada película de Truffaut.
Pero mejor paramos acá, porque si sigo un rato ¡vamos a terminar todos parientes!


Arriba Montag y su jefe en la película.
Abajo la viñeta de Rep (Miguel Repiso) con que Página12 homenajeó a RB.
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8 comentarios:

Marinarrosa dijo...

Me gustó mucho este post porque ante la muerte de un gran escritor lo único que se le ocurre a la gente es hacer una necrológica o una apología póstuma. Después que leí "Sostiene Pereira" ,( y enamorarme de él, de Tabucci y definitivamente de Marcelo Mastroiani) rechazo de plano la tentación de escribir el día de la muerte de alguien que admire aunque llore a mares:) . Usted, Fernando, se las ingenió para recordar a Bradbury maravillosamente. No sabía lo de Montag-Kafka y ahora tengo que ver la película de "Orson", (como lo llamaba familiarmente Malmacín,el niño del trineo uruguayo:)).
Si alguien practicara conmigo la técnica freudiana de asociación de ideas, ante la palabra "Bradbury" contestaría inmediatamente "felicidad".
Felicidad es lo que siempre me provocaron sus cuentos aunque sus finales no la sugirieran. Ahora que se escribió mucho sobre él, me enteré que siempre escribió ,no con desgarros, ni tristezas,ni apremios, sino con alegría. No sé si es bueno o no para sus propósitos, pero eso es lo que lo trasmite.El hecho de que sin estudios universitarios haya ido a leer por varios años a una biblioteca me hace quererlo aún más.
En cuanto a F 451, para mí es inolvidable cuando el bombero huye del mundo tecnológico y controlado en que vive hacia otro mucho más sencillo y despojado y libre.
Aparte de varias historias de Crónicas Marcianas, el cuento que nunca se borrará de mi mente es "La bruja de abril".Una bruja encantadora, pero no recuerdo a qué libro pertenece.

Creo que escribí demasiado.Lo siento mucho. El comentario nunca debe competir en extensión con el post...me parece...no sé.


crónicos abrazos marcianos:)

Marinarrosa dijo...

Comentario 2:
me gustaría saber si alguien del Sur ha escrito algo tan hermoso sobre el Sur como ese párrafo de Bradbury.

Fernando Terreno dijo...

Marinarrosa:
Qué bien hizo en recordar a A. Tabucchi. Este es bueno, lo que se dice bueno en serio.
No pienso hacer una necrológica porque no me da el cuero ni me gusta pero, tengo una anécdota sobre el punto, que involucra a Manuel Mujica Lainez, divertida y de fuente confiable:
MML había sido toda su vida colaborador de La Nación y sabía que las redacciones tienen casi listas necrológicas de aquellos que están próximos a partir. Ya viejo, iba poco por el diario, se acercó al Jefe de Redacción y le pidió que le facilitara la que correspondía a él.
-¿Para qué, querés conocer detalles de tu vida?
-No, simplemente quisiera que esté bien redactada así que voy a escribirla yo.

juan pascualero dijo...

No puedo resistir la tentación de mencionar aunque más no sea "El vino del estío" (Dandelion Wine). Mi admiración por dicha obra es tan grande que no sabría expresarla.
Excelente la entrada como de costumbre. Un abrazo.-

Fernando Terreno dijo...

Juan Pascualero:
Gracias por tus venidas a recorrer el espinel. Ya mismo pongo a "El vino..." en la lista.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

A Bradbury llegué (como a Poe y a tantos otros) por escuchar en las tardecitas quilmeñas, haciendo los deberes de la primaria, a Guerrero Martineitz..
Pongo en la lista mi novela favorita "La feria de las tinieblas".
cata

Fernando Terreno dijo...

Cata:
Grande el Negro que le hizo un famoso reportaje a Cortázar que duraba mucho y se dio el lujo de pasarlo, y los silencios y la gran cantidad de músicos y de escritores que "vio" antes que nadie.
¿Reencuentro se llamaba el programa?
Un abrazo y gracias por la visita.

Anónimo dijo...

Si, el que yo escuché durante años se llamaba Reencuentro, mis viejos lo venían escuchando ya desde "El show del minuto". Gracias a él conocimos mucha literatura y mucha música!
cata