viernes, 14 de septiembre de 2018

Títulos admirables


Cerrado por melancolía y Cuentos de amor, de locura y de muerte. Más allá de los cuentos incluidos, algunos cercanos al “cuento perfecto” que todos quisieran escribir, los títulos de estos libros me parecen superlativos. El primero, porque es un adjetivo o verbo y un sustantivo que se refuerzan y actúan entre ellos en una combinación demoledora y el segundo porque es una síntesis de los temas que están presentes en todo buen cuento.

Entre los títulos de libros de poesía me resultan particularmente gratos e interesantes Una temporada en el infierno y Otoño imperdonable.
La poesía es el género donde los títulos, cuando son malos, suelen ser difíciles de soportar: De mi lira, Estrellas en la noche, Del solar nativo, En el rosal.
Entre otros que no me gustan está también Las nieves del Kilimanjaro. Tengo aprensión por los escritores que necesitan fotografiarse cazando elefantes, pescando tiburones o explorando continentes extraños. Me parece que con escribir bien, alcanzaría.

Mientras  agonizo, Nicolasa verde o nada, Viaje al fin de la noche, Cien años de soledad también están entre los títulos más inspirados que se hayan escrito, a mi gusto y entender. En este caso todos de novelas. Y hablando del tema recuerdo un sardónico comentario de J. L. Borges sobre El sayal y la púrpura y Todo verdor perecerá: ¡Qué títulos impresionantes escribe Mallea, lástima que después se obstina en acompañarlos con una novela!

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2 comentarios:

Jorge Aloy dijo...

Hola, Fernando ¿podés creer que hace un par de meses gané el Parrafus con el cuento que da nombre a este libro? Es maravilloso. Además, gracias por la mención de Viaje al fin de la noche, es incomparable. Abrazo grande.
Jorge Aloy

Fernando Terreno dijo...

Qué lindo, Jorge.
Sobre Viaje al fin de la noche, me parece oportuno comentarte que lo leí por recomendación tuya (en tu blog), allá lejos y hace tiempo (otro lindo título, dicho sea de paso.
Un abrazo
Fernando