Abogadas y otros profesionales
1
Un joven y ascendente abogado sabía que heredaría una fortuna cuando su padre enfermo muriese. Pensando en que también él quedaría sólo concluyó que precisaba una mujer acorde a su nivel para hacer de ella su compañera en la vida.
Con la decisión tomada, esa noche fue al bar de la ciudad donde se juntaba lo más granado del foro local. Se fijó especialmente en una colega muy bonita. Estaba tan buena que era la admiración de todos los concurrentes.
Se acercó a ella y le dijo:
- Puedo parecer un abogado común, pero en pocos meses mi padre va a morir y heredaré mucha, pero mucha plata. ¿Querés acompañarme y venir conmigo a mi casa? Podés llegar a ser mi mujer.
Impresionada, la hermosa y brillante abogada aceptó. Fue aquella noche a la casa del joven colega... Y tres días después se transformó en su madrastra.
MORALEJA: Los abogados pueden ser muy hábiles, pero las abogadas, además, son mujeres.
2
Un coronel encara a una prostituta:
-Hola hermosa, aceptaría mi compañía.
-Sí querido, quinientos.
-De acuerdo, - y dándose vuelta, con voz estentórea dice:- ¡Compañía! ¡De frente, maaarrrch!
3
¿Cuál es el colmo de un plomero?
Tener un hijo desoldado.
¿Cuál es el colmo de un bombero?
Tener un hijo chorro.
¿Cuál es el colmo de un sastre?
Tener un hijo botones.
¿Cuál es el colmo de un pelado obsesivo?
Ir a cortarse “él” pelo.
Los dibujos son de Argüelles y de Can
viernes, 17 de septiembre de 2010
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1 comentario:
Tas muy chistoso. Me hace bien venir a La Pulpera y distenderme con la risa cuando, como ahora, llego de trabajar. Un abrazo.
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