domingo, 20 de marzo de 2011
Pulp Fiction
El policial negro (norteamericano) se diferenció del policial clásico (inglés) al reemplazar el clásico esquema, que iba de los efectos y los indicios hasta la resolución del enigma mediante el método analítico-deductivo, por uno nuevo; donde no hay buenos y malos, el detective es un hombre de acción, una parte tan cercana a la corrupción como el resto de los involucrados en la trama; donde es difícil separar delito de negocios, jueces y delincuentes, de policías.
El viraje hacia este tipo de literatura estuvo directamente influenciado por la situación social y económica de los EEUU, previa a la gran crisis capitalista de 1929, huelgas, ley seca, gangsterismo político, que culminó con la caída de Wall Street el 24 de octubre de 1929, el famoso “jueves negro”.
Del mismo modo, el auge del policial clásico tampoco fue ajeno a la situación social en Inglaterra a mediados del siglo XIX, al florecimiento del positivismo y a la confianza ilimitada en las ciencias y en el progreso, en la razón y en la lógica, que “casualmente” pasaban por un momento de esplendor. El sueño de la “razón” que comenzó con el enciclopedismo en Francia estaba dando sus frutos en la técnica y en la revolución industrial y se mostraba en la literatura.
En 1920 H. L. Menkel y Jack Nathan fundaron la revista Black Mask que mezclaba historietas con cuentos y relatos breves de todo tipo de géneros: aventura, misterio, romances, policial, etc. A partir de 1933, su editor Joseph Shaw la enfocó, exclusivamente, en el género policial; pero para 1929 ya había publicado a Horace Mc Coy, Raymond Chandler, Dashiell Hammet y Paul Cain junto a otros escritores brillantes, por lo que se dice que el policial negro nació con ella.
La revista se editaba en un papel barato, de baja calidad, una especie de papel estraza. Lo que conocemos como “rústica” y que en inglés se denomina pulp paper. Allí nació la pulp fiction, nombre que pasó a ser la denominación genérica y de donde lo tomó Quentin Tarantino para darle el título a su película.
Nota:
Casi todo lo incluido en este artículo se lo escuché a Osvaldo Gallone en una de sus charlas en la Biblioteca Nacional o lo tomé de este blog, donde pueden profundizar sobre el tema:
http://elblogdemara5.blogspot.com/2010/04/el-thriller-o-la-novela-policial.html#ixzz1FYNT3ePV
De modo que lo único que he aportado yo es alguna que otra idea y el susto y la disparada.
Es completamente un sinsentido atribuir el mismo origen a La Pulpera.
De ninguna manera La Pulpera viene de Pulp Era, aunque es cierto que nació para la misma época de los conflictos entre Uruguay y Argentina por las pasteras, es decir por las fábricas de Pulp paper. Voy a cortar acá, porque el ácido viene muy fuerte…
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Etiquetas:
Literatura
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6 comentarios:
No puede ser!!!Yo, una fanática de Pulp Fiction nunca me di cuenta de la Pulp Era!
Seré breve: adoro este género. Creo que comencé a los doce años con la colección El séptimo círculo.
Hay una novela de Bukowski que se llama Pulp y a pesar de que no me gusta totalmente este autor, esa novela es muy buena.La leí en Internet.
abrazos
El blog recomendado me gustó mucho. Ya lo tengo casi todo leído.
Gracias
Marple:
Gracias por el dato de la nocela de Ch.B. Ya mismo la paso a la lista...
El blog es muy claro,bastante más que el Pulp-Ero (que en su descargo avisa estar un poco restringido por el tamaño autoimpuesto).
Un abrazo
Como fuere, para esta adicta al policial negro de USA y el policial clásico británico, el artículo cierra unos cuantos hilos sueltos sobre el asunto. Y esa suerte de detectives antihéroes orilleando el delito son encantadores! Igual creo Fer, que los británicos siguen sacándole leguas de distancia a los american boys en este género, más allá del genio de Tarantino.
Abrazo Amigo!
Hagamos un trato, vos con Travolta y yo con Uma.
¡Y yo que pensaba que vos eras el payador mazorquero...!
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