“Salvo el comer, todo es ilusión.”
“Temprano aprende uno lo bueno de leer en los ómnibus: que la lectura siempre avanza.”
“Prometeo fue el único dios que tuvo nombre de candidato.”
“Soy bigenérico: mis géneros son el ensayo y el bolero.”
Pongo
estas frases suyas porque el tipo que las dice nos promete desde el vamos
humor del bueno, lenguaje del mejor y diversión asegurada. Si a eso agregamos
que es un periodista obstinado, erudito y riguroso, que trabaja sus textos “como
carne pa’ chorizo” y que hace un uso exquisito del idioma, nuestras neuronas
tienen una fiesta al alcance de la mano: el fulano se llama Víctor Hurtado, el festín es su libro Otras disquisiciones.
Es
una recopilación de artículos que este peruano publicó en diarios y revistas de
Costa Rica, donde vive desde hace más de veinticinco años. Hay de todo como en
botica, agrupados en secciones desopilantes en las que podemos encontrar concisas
reseñas de libros, biografías de ídolos musicales, un consultorio sobre temas
de lengua, una que se llama “A ciencia incierta”.
Uno
de sus mejores logros es que contraría esa despreciable moda periodística
(¿argentina?) de estar a favor de todo. Acá no, alaba lo que le gusta y critica
con ferocidad lo que no le parece bien. Lo dice claramente: “Escribo sobre lo
que me gusta y sobre lo que no me gusta.”
Basta
de cháchara. Les adelanto algunos
títulos para que vayan conociendo el menú y un par de fragmentos para que
comiencen la degustación: “Noche de fonda”, “El largo adiós de Dashiell Hammett”,
“¡Oh, retórico bolero!”, “Hacia una neopoética del reggaetón”, “Dulces amazonas”,
“El fascismo postalcohólico de Chavela V.”
¡Buen
día, Bacon!
Los filósofos
proclaman que cualquier día es bueno para morir, mas las otras personas saben
que el mejor día es el día siguiente. Es curioso que siempre tengamos mucho que
hacer hoy en esta vida. Aunque él también fue filósofo, Sir Francis Bacon no
llevó prisa en practicar aquella resignación del tiempo. ……
¿Es tragón con vegetales?
–Profesor: El otro día, o así, entré en un restaurante con mi novio. Celebrábamos treinta años de noviazgo, algo que muy pocos pueden decir en estos frívolos tiempos de falsos compromisos. Bueno, quizá sea exagerado eso de ‘entrar’ porque mi novio está un poco gordito, tanto que, para pasar de costado, debe ir de frente. Mejor: las mesas de fuera son más románticas. Todo iba bien hasta que el salonero nos pidió que ordenáramos. Fue bastante arduo ordenar las sillas con gente puesta, pero lo logramos.
…
Sin quererlo, usted hizo un juego de palabras llamado ‘calambur’. En el calambur, las sílabas se separan y se juntan para que las palabras cambien de sentido: ‘plátano es’, ‘plata no es’. El poeta mexicano Xavier Villaurrutia escribió estos célebres calambures:
y mi voz que madura
y mi voz quemadura
y mi bosque madura
y mi voz quema dura
…
Todo
esto llega hasta ustedes por la gentileza del amigo Jorge Arroyo, de Lápix
Editores, Lima – Perú, que me hizo llegar el libro de Víctor Hurtado.
El
fragmento del calambur está dedicado a una amiga uruguaya, Andrea Albarenga,
que disfruta con ellos..
4 comentarios:
Amé esta entrada... Y como está dedicada a mi persona humana e individual, estoy que no doy más de orgullo. Que no paso por la puerta, vamos, como el caballero del restaurante.
Y gracias por presentarme al Sr. Robado. O Hurtado, como se prefiera.
Me sorprende que este tipo de humor funcione desde Centro a Sudamérica. Se ve que tenemos códigos comunes tan secretos que nosotros mismos los desconocemos.
En cuanto al Sr. Hurtado, pasará a ser Robado a menudo en La Pulpera, avisándole, para que mis afanes no sean considerados afanados.
Brindo porque te haya gustado, por él o por lo que sea. Alguna cosa ha de ser un pretexto útil para mandarme al garguero este vaso.
Un abrazo.
Si es curioso,como tenemos afinidad para entender el idioma y sus distintivas intenciones,ese que leemos entre lineas,una pequeña inflexión o giro que resulta incomprensible para otros,sin duda tenemos en común mas de lo que imaginamos,como siempre me descubres y abres otras ventanas.
Un abrazo caballero.
América:
Es que, América, América nos une.
Estoy poniendo tantas veces América, que esto ya parece esa canción que cantaba Nino Bravo...
Un abrazo grande y gracias por ser fiel visitante de esta pulpería.
Publicar un comentario