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Peluquería y afines
En recuerdo de Antonio Taormina, Julio Hidalgo y Celedonio Risso, peluqueros "de los de antes".
El oficio de peluquero ha tenido desde siempre otros servicios “afines”. Además del corte de cabellos y la afeitada ha incluido desde teñidos y pedicuría hasta masajes, extracciones de dientes y sangrías, sin contar los anexos como ventas de loterías, levante de quinielas y botica.
A peluqueros y cirujanos los unía su destreza en el uso de la navaja, a tal punto que compartían una cofradía –los actuales sindicatos-, la Barbers Surgeons Company of London, allá por 1540 y hasta 1745.
En realidad, en las peluquerías se realizaron actos médicos, generalmente para pobres, hasta que el progreso y especialización de la Medicina separó ambos rubros definitivamente. En la actualidad, estas prácticas continúan en Asia y África, con servicios ambulantes, que incluyen cortes de pelo, arreglo de fracturas y extracciones dentales.
Ahora que las peluquerías se han transformado en “Salones de Belleza”, los figaros en coiffeurs, estilistas o esteticistas; parece imposible que una de las actividades principales que allí se realizaban hasta hace poco más de cien años fueran las sangrías (extracciones de sangre, supuestamente curativas). Como constancia de ese pasado quedan los carteles con que se identificaban. Anunciaban sus servicios colocando junto a la puerta de sus locales un cilindro con bandas blancas y rojas que representan las vendas y la sangre, respectivamente (hasta hace unas décadas era común ver este símbolo en las peluquerías de distintas partes del mundo).
Con datos tomados de:
*Ríos de sangre Por Raúl Alzogaray
Página12 Suplemento Futuro del 21 de Marzo de 2009
http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/futuro/13-2107-2009-03-21.html
*Los límites de la Medicina, 1984, Editorial Andrés Bello.
De yapa una frase de Bernard Shaw: Si la medicina sigue progresando a este paso, en poco tiempo estaremos todos enfermos.
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domingo, 22 de marzo de 2009
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5 comentarios:
Hola fer, yo soy el coso de arriba. Me gustó mucho tu investigación, es más me gustaría que profindizaras en esa ruta que une y separa a Barberos, Curanderos y Médicos. En el fondo los más modernos médicos, los más informados, los tecnológicamente mejor dotados, no son nada si no tienen "rapor" de brujo con sus pacientes.
La investigación está buena, hace falta que lo pongas tu impronta.
Adelante.
Te invito a mi blog
Fernando: agradezca a la vida que no lo trató un médico del siglo XII :)
Código de Salud de la Escuela de Salerno, redactado en verso en el siglo XII:
“La sangría purga veladamente el cuerpo/
porque excita los nervios, mejora los ojos/
y la mente y mueve el vientre/
Aporta el sueño, limpia los pensamientos y expulsa la tristeza,/
y el oído, el vigor y la voz aumentan cada día”.
No lo invito a mi blog porque no ha salido de la imprenta.
Muy buena "La pulpera", como siempre.
Saludos cordiales.
Hola Tordo:
Muy buenos esos versos. Lejos de mi estuvo referirme a ellos. Lamento desilusionarte, pero no tengo mucho más sobre el tema, que lo que puse. El artículo de Alzogaray está muy bueno y lo podés buscar en el link.
Hola Flavya:
¿Tenés la versión ilustrada por Oski del código de la Escuela de Salerno? ¿Y el "Medisinal Brutoski Ilustrado"?
Unas maravillas imperdibles, sobre todo para el que las tenga, porque no se consiguen más por acá.
Gracias y un abrazo a ambos.
Fernando
Miré usted, Don Terreno. Ignora por completo que quería decir el pirulín de la puerta de las peluquerías.
Ahora pienso que, en el avance de la profesión, el peluquero se transformó en el tipo que te tiraba una fija para Palermo, y posteriormente en ese otro que habla de todo y tiene la precisa en el destino del país.
Un abrazo.
Jorge Aloy
Fe de erratas: Quise decir "ignoraba por completo".
Jorge Aloy
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